Epa

Y la vi así, confundida, tratando de entender todo. Vulnerable, y me fascinó.
Cómo paso esto? cómo explicar esta sensación? cómo encasillarla? cómo pensar en otra cosa? Demasiadas preguntas y ninguna respuesta.
Tiene que haber respuestas? son realmente necesarias? las respuestas no le quitan lo mágico y formidable al asunto?
Porque uno tiene que poder explicar cada instancia de la vida? Porque uno tiene esa necesidad?
Sus ojos me escrutaron en busca de un "¿cómo? ¿qué? ¿porque yo? ¿porque ahora? "
Yo no tengo esas respuestas hoy. 

Es un terreno complicado, maravilloso, pero complicado.
Y no quiero gastar tiempo buscándolas. Se vive una vez.

Comentarios

Entradas populares de este blog

La apuesta

La parca

Sueños de cuarentena